viernes, 28 de septiembre de 2012

Lilia Vera en Puerto Rico


Luis Meléndez Chuello.

Gran indignación causó la presentación de la cantante y cultora de la música venezolana Lilia Vera y su grupo el pasado sábado 22 de septiembre en el Centro de Bellas Artes de Santurce, por invitación del Consulado de Venezuela en Puerto Rico. Y la indignación se regó como pólvora en redes sociales y foros de internet, hasta llegar a Caracas.





La invitación la formuló el cónsul de Venezuela en Puerto Rico, Jesús Sevillano, a veces por intermedio de un funcionario del Consulado, y la misma Lilia Vera, sobre todo en medios locales allegados al independentismo en Puerto Rico, como el diario Claridad y el programa de Inés Quiles en Radio Isla, dando la sensación de que se invitaba más a los independentistas que apoyan al gobierno de Hugo Chávez que a los venezolanos que residimos en la isla del encanto. Además, no a todos los inscritos en la base de datos del Consulado nos llegó la invitación por email y en otros medios de mayor circulación como El Nuevo Día, la nota fue publicada posteriormente. Como las entradas gratuitas se habían agotado desde el jueves, un número importante de venezolanos quedaron sin entrar. Ya las cosas no olían bien.

Esa noche, tal y como lo relatan varios foristas de Noticiero Digital y usuarios de Twitter, la velada comenzó con el cónsul Sevillano, quien dio “...el discursito cursi de que Chávez es todo corazón y que quiere salvar el planeta....y que Fidel Castro es el hombre más importante del siglo XX....para burla de la gente que esperaba un concierto sin tintes políticos.”



Luego, salió a escena Lilia Vera, que “...entre canción y canción comenzó la arenga politiquera chavista”, sin importarle que la invitación era obviamente para oír música venezolana, no para un mitin político. Y de ahí parte la molestia. La gente fue a ver a la artista, a la exponente de nuestro folklore, la de extensa y reconocida carrera nacional e internacional de 40 años, forjada en democracia y con apoyo de la empresa privada, independientemente de una preferencia política que nunca ocultó y que no impidió todos los logros que tuvo. El periodista y escritor zuliano Ángel Mendoza Zabala en el artículo Lilia, Sevillano, publicado en su blog, describe magistralmente esta paradoja:

“Lilia Vera, por ejemplo, grabó su primera producción para Interamericana de Grabaciones (Integra) en 1973. Caldera en Miraflores y ella haciendo música. Allí incluyó “Pueblos Tristes”, la célebre pieza de Otilio Galíndez. Esa que decía de la muchacha que pila y pila, del hombre torvo junto a la vieja, del santo de medio peso y la vela que muere en aceite sucio.
En 1976 ve luz su segundo disco, esta vez de la mano de Promúsica (Promus), el sello disquero privado que más favor le ha hecho a la difusión de la autoctonidad patria, y no creo exagerar en decir que en Latinoamérica completa no hay un ejemplo tan bueno como Promus. Era Pérez presidente, y a pesar de ser Acción Democrática contraria ideológicamente al gobierno de Allende, nadie le censuró “A Víctor”, un tema que canta al líder de Quilapayún al que le cortaron las manos y flotó, tras morir, en el Mapocho marrón de Santiago.”

Al ver la arenga política a favor de Chávez y contra el capitalismo entre canción y canción, hasta llegar a afirmar que “sin duda este era el momento más brillante e importante de nuestra historia“, la gente comenzó a irse. En un punto preguntó "¿Cuántos venezolanos hay aquí?", y muy pocos levantaron la mano. Una muchacha de la primera fila le echó en cara la inseguridad que padecía Venezuela y la cantante le contestó que ese había sido un problema de siempre, pues a su papá se lo mató la Seguridad Nacional. No pudo hacer más que reiterar los “Uh ah Chávez no se va”, y terminar el concierto con un "Viva Chávez, Viva Fidel, Viva el Che Guevara y Viva Puerto Rico Libre del Imperio", gesto aplaudido por los independentistas que quedaban en la sala.



Por supuesto, está la molestia evidente, del vulgar acto político en sí. Volvemos a citar el excelente escrito de Mendoza Zabala a este respecto:

“La gente que abandonó el recinto lo hizo por lo mismo que lo haría alguien que va al Aula Magna a ver a la Sinfónica Simón Bolívar y rematen el set, antes del intermedio, con una versión académica de la cancioncita de Hany Kauam, Omar Enrique y Los Cadillacs. Un espectáculo cultural que se convierte en adulador de un ser humano sólo ocurre en Pyongyang. O en La Habana, aunque con menos frecuencia. Ocurría en Beijing en alguna época mientras Mao estaba vivo. Ocurrió en Moscú. Pero en tiempos contemporáneos, la figura del partido está alejada del hecho propio cultural.

Pero la molestia soterrada, la que va en el pecho, y no por eso insignificante, es el hecho de que nuestro Consulado se preste para estas cosas. Estoy seguro de que muchos venezolanos, los que fueron, los que se salieron, los que no pudieron entrar y los que se sintieron marginados de la convocatoria, se sienten hoy cada vez más lejos de nuestro Consulado. Incluso siento que hemos sido declarados sus enemigos. Esto podrá sonar fuerte e incluso antipatriótico (término a veces confundido con apátrida, que es otra cosa), pero cuando ese Consulado trae a un ícono de la música venezolana a Puerto Rico, prefiere invitar a un coro de voces concordantes antes que a sus propios conciudadanos y mezcla proselitismo político con arte y cultura venezolana en otra tierra, es inevitable sentirnos alienados de la que debería ser nuestra casa fuera de casa. Y si eso es así para nosotros por un concierto, sólo puedo imaginarme lo que deben sentir los venezolanos en Miami, obligados a peregrinar a otra ciudad para ejercer un derecho constitucional.

Sabemos que no siempre ha sido así. Sabemos que en otros eventos auspiciados por el Consulado no ha habido proselitismo político alguno. Recordamos gratamente las pasadas ediciones de la Navidad Venezolana en Guaynabo, conciertos del propio Sevillano o de Cecilia Todd en la isla, donde a pesar de la presencia de personas afectas al gobierno de Hugo Chávez y de oposición, sólo hubo paz, unión y respeto por nuestro arte y  nuestra cultura, por nuestras diferencias y distintas preferencias políticas. Hacemos votos para que el Consulado retome la vía conciliadora, sobre todo de cara a unas elecciones trascendentales en nuestro país.

Mi tripón, El pregón de las flores, La culebra, Son chispitas, La negra Dorotea, El Becerrito, Coplas y otras grandes canciones que conocimos en la voz de Lilia Vera, son venezolanas, son parte de nuestro acervo cultural y de nuestros corazones, parte de la infancia de muchos, gracias a nuestros padres que nos enseñaron a amar a nuestro país por su música y sus autores. Son piezas que viven y vibran en quienes vivimos alejados de nuestra patria. Y estas canciones, así como muchas otras, al igual que nuestra bandera, nuestros símbolos, nuestro himno, nuestra cultura, nuestros íconos, nuestra historia y nuestro Libertador, no son expropiables.

Y tampoco lo será nuestro voto este 7 de octubre.



Luis Meléndez Chuello es administrador de este blog, parte del equipo de administradores de la página de Facebook del Comando Venezuela en Puerto Rico y de la cuenta Twitter @MUDVeneBoricua

jueves, 27 de septiembre de 2012

15 Minutos con Venezuela, domingo 23 de septiembre de 2012

La campaña de Capriles versus la de Chávez, el crecimiento del flaco en las encuestas, la invitación a una misa el próximo sábado 6 de octubre y muchas otras cosas en 15 Minutos con Venezuela, con el profesor Luis Pericchi Guerra. Este segmento corresponde al pasado domingo 23 de septiembre, como parte del programa NotiUno Internacional, emitido los domingos de 6:00 a 9:00 PM por NotiUno 630.


miércoles, 19 de septiembre de 2012

El Arepazo Mundial en Puerto Rico


El pasado sábado 15 de septiembre, los venezolanos en Puerto Rico dijimos presente en el Arepazo Mundial, evento convocado para ese día por el Comando Exterior Venezuela, Mujeres por el Progreso y VenMundo.



El también llamado Día Mundial de la Arepa, nació como parte de un intercambio en las redes sociales, principalmente Facebook, donde se estima que hay 1.300.000 venezolanos registrados que viven en el exterior.





























La idea fue sentar a toda esa comunidad en torno a la mesa para compartir el pan venezolano por excelencia, como sinónimo de un compartir genuino, lleno de esperanza, por un país mejor, para todos y de progreso.














Como resultado, venezolanos de 53 ciudades en todo el mundo, Caracas incluida, se dieron cita. Y Puerto Rico no podía faltar. Así, la gran familia venezolana en suelo boricua se encontró a partir de las 3:00 PM en Levitown, frente a Budare Street, la guagüita del chef Leo y su familia.




























A pesar de la inclemente lluvia que cayó hasta pasadas las 5:00 PM, nos acercamos a degustar la reina pepeada y la de pabellón, las primeras en acabarse, y también de pollo, carne mechada y pernil, en un ambiente grato, donde reinó la cordialidad, la esperanza y una idea fija que se ha hecho cada vez más clara con el pasar de los días hacia el 7 de octubre: hay un camino.









Queremos agradecer a toda la gente del Comando Venezuela en Puerto Rico por su excelente trabajo de organización y difusión en tan poco tiempo, al chef Leo y a su familia  por su esmerada atención, y a los más de 100 residentes, visitantes y amigos que nos acompañaron esa tarde veneboricua.













No duden en darle un Me gusta a la página de Facebook de Budare Street para más información. Tampoco olviden de seguir tanto la página de Facebook como el blog del Comando Venezuela en Puerto Rico y este blog para nuestras siguientes actividades de cara al 7 de octubre.





























Para ver más fotos del Arepazo Mundial en todo el mundo, recomendamos la página del Comando Exterior Venezuela y hacer la búsqueda de los hashtags #ArepazoDelProgreso y #DiaMundialDeLaArepa en Twitter.


¡Hay un camino!

viernes, 14 de septiembre de 2012

¡Llegó el día del arepazo mundial en Puerto Rico!



Este sábado 15 de septiembre, a sólo 22 días del cambio hacia la Venezuela del Progreso, Puerto Rico dice presente en el Arepazo Mundial, esfuerzo convocado por VenMundo y el Comando Exterior Venezuela en más de 30 ciudades de todo el mundo.

La idea es promover e incluso profundizar la unión de los venezolanos, sin importar lo lejos que estemos de nuestra patria ni nuestra posición política.

“Queremos que la arepa sea el símbolo del reencuentro entre los Venezolanos. Además, la arepa es la comida más democrática del país, une a los venezolanos, sin distinción de clases, razas o ideologías, ya que es el único plato que está presente tanto en las mesas de las familias más acomodadas como de aquellas que están pasando necesidad. Y así como el 15 de septiembre convocamos al arepazo por el rencuentro, después del 07 de octubre llamaremos a la unidad de todos los venezolanos, tanto de los que viven en el país como los que viven en el exterior, para construir la Venezuela del Progreso”, dijo Tony De Viveiros, internacionalista y coordinador de VenMundo Venezuela.

En ese espíritu, el Comando Venezuela en Puerto Rico se une a esta iniciativa e invita a todos los venezolanos, veneboricuas, amigos y allegados a Budare Street, la arepera del chef Leo en el estacionamiento de Walgreens de Levitown, entre las 3:00 y las 7:00 PM.

Llegar es muy fácil. En el expreso #22, busca la salida de Río Hondo, cruza a la izquierda en el McDonalds y luego sigue derecho hasta el Walgreens. 




Recuerda no estacionarte en el Walgreens o nos pueden multar, hay suficiente espacio alrededor de la guagüita del chef Leo. No llegues muy tarde, podrías correr el riesgo de quedarte sin tu arepa, y no olvides tu sillita plegable.

Si gustas, dale un Me gusta en su página de Facebook.

Te esperamos en Budare Street. Por la unión de los venezolanos en el exterior.